Publicado em 09/08/2019 13h:57min.
La rutina de Claudia Puebla (37) es un tanto agotadora. Es médica, mamá de un varón de 6 años y de una nena de 9 meses por lo que su jornada incluye trabajar, organizar las actividades los pequeños y amamantar. Pero además se toma tiempo para sacarse el excedente de leche que le queda y entregarlo al Banco de Leche Humana de Mendoza.
Así cada día se levanta a las 5 de la mañana para poder estar a las 7 en su empleo y cumplir con todas sus responsabilidades.
Ella es una de las 3.988 mujeres que desde que abrió en 2011 se convirtió en donante de este banco que tiene por objetivo alimentar a los prematuros de la provincia. En la actualidad son en promedio unas 40 voluntarias mensuales y suman entre 100 y 120 litros de leche por mes.
Podría decirse que Claudia es una reincidente -en el mejor sentido de la palabra- ya que es la segunda vez que realiza todas las acciones necesarias para brindar su aporte al banco. En 2013 el nacimiento de su primer hijo la llevo a acercarse a la institución.
“Apenas me bajó la leche era mucha cantidad y para que no me diera una mastitis me compré un buen saca leche y tuve que tirar como un vaso entero. Me dio tanta pena que averigüé por internet para ver cómo acercarme al banco”, recordó la médica.
Desde entonces se puso en contacto para ser donante domiciliaria y lo fue hasta que su hijo tuvo dos años.
Tiempo después, cuando nació su segunda hija, se comunicó nuevamente. “Vinieron y me hicieron todos los análisis y nos pusimos de acuerdo para las entregas”, detalló. Por esa razón ya lleva 9 meses amamantando y sacándose para donar. “Es un esfuerzo bastante grande porque te lleva tiempo pero también tiene un montón de gratificaciones”, aseguró Claudia. Para ella, el hecho de donar es parte de un agradecimiento por sus hijos. “Yo tengo una predisposición genética para tener mucha leche y hay muchos niños que no tienen nada. Como mis hijos están tan bien es como una manera de agradecer a la vida.
Ella estima que dona entre un litro y dos por semana. Cada vez que se extrae el líquido con su sacaleches manual lo guarda en el freezer en frascos estériles y los rotula, tal como hacen en sus casas muchas otras voluntarias.
Una vez por semana se lo entrega al personal del banco que pasa a buscarlo por su hogar. “Siempre se adaptan a mis necesidades y vienen en los tiempos que yo puedo”, contó la profesional.
Tal como le han dicho, con un centímetro cúbico de leche alcanza para darle a un prematuro, por lo que calcula que, en este tiempo, “he hecho un gran aporte para muchos chicos de la provincia, remarcó; una tarea que es rentada en otros países pero no acá, donde es puro acto de amor.
Entrega admirable
Para Celia Vallejos, encargada del centro de lactancia materna del Servicio de Alimentación, Nutrición neonatal y Banco de Leche Humana, la entrega que tienen las donantes es admirable. “Las mamás que deciden donar y te llaman se ponen al servicio de los demás y llevan a delante un acto de amor impresionante”, expuso la nutricionista.
Se sabe, el uso de la leche humana es la segunda medida infectológica universal de mayor impacto luego del lavado de manos. “Por lo que gracias a esta entrega tenés el mejor alimento para aquel bebé que no puede ser amamantado por leche extraída del pecho de su propia mamá”, comentó Vallejos y aclaró que una vez que se obtiene la leche se pausteriza, en un proceso que demanda estrictos controles de calidad.
Una de las mayores dificultades con las que se encuentran en el Banco de Leche es mantener el número de donantes, ya que todas ellas son temporales. “Si bien hemos tenido casos en los que una misma mujer ha permanecido más de un año y medio como donante, es excepcional y lo normal son 2 o 3 meses pero incluso hay algunas que hacen una única donación”, sumó Adriana Yannelli , bromatóloga y encargada de calidad del servicio. Justamente por esa razón una de las necesidades permanentes es la difusión de su tarea para seguir sumando voluntarias.
Existen dos tipos de donantes: mamás que se extraen la leche en sus casas y que luego entregan a los recolectores (principalmente en el Gran Mendoza por un tema de movilidad) y las que se acercan a donar al Banco, (en el hospital Lagomaggiore) o a los centros recolectores que hay en toda la provincia. “También tenemos muchas donantes que tienen bebés internados, vienen al Lagomaggiore a sacarse para abastecerlos y donan su excedente”, dijo Vallejos y subrayó que siempre se pone en primer lugar la alimentación del propio bebé. “Tienen que estar cubiertos los requerimientos del niño y lo que se dona es aparte”, indicó.
Consultada por los receptores de la leche, Yannelli detalló que el principal objetivo es cubrir a todos los bebés de la provincia que pesen menos de 1.500 gramos.
“Este objetivo lo alcanzamos, pero siempre nos gusta abarcar más y llegar a los que son un poco más grandes pero también la necesitan”, reconoció. Entre los principales efectores a los que se destina la leche se encuentra la neonatología del Hospital Lagomaggiore y en segundo lugar el Notti. “Ellos nos piden generalmente para bebés hospitalizados, que generalmente son más grandes y si tenemos les damos porque está comprobado que el bebé se recupera más rápido con leche materna, eso es impresionante”, recalcó.
En toda la provincia
El Banco de Leche Humana de Mendoza, ubicado en el hospital Lagomaggiore, trabaja en red con centros recolectores distribuidos en toda la provincia como el hospital Paroissien, el Notti, el Carrillo, el Perrupato y el Metraux, entre otros. Desde cada uno de ellos envían la leche “cruda” para que el banco la pasteurice y luego se le pide cuando tienen necesidades.
Otras 7 provincias cuentan con este tipo de instituciones y están distribuidas en: el Hospital San Martín de La Plata; la Maternidad Sardá de la Ciudad de Buenos Aires; el Hospital Perrando de Resistencia, Chaco; el Hospital Carrillo de Córdoba; el Hospital de Cutral-Co-Plaza Huincul, Neuquén; el Hospital de General Roca, Río Negro y el Hospital Vidal de Corrientes.
Requisitos
Para ser donante
Las interesadas en ser donantes de leche materna deben cumplir los siguientes pasos:
– Llamar al 5204611
– Acordar una cita para una extracción de sangre en su domicilio.
– Sacarse el excedente de leche, rotularla y guardarla en el congelador.
- Coordinar para su recolección
Por Carla Romanello - cromanello@losandes.com.ar
Donante. Claudia Puebla amamanta a su pequeña hija de 9 meses pero además, almacena y entrega el excedente de su leche materna.
Foto: Marcelo Rolland / Los Andes
Fonte:https://www.losandes.com.ar/article/view?slug=banco-de-leche-dan-amor-y-...